Necesario optimismo
El optimismo es una de las fortalezas de la llamada psicología positiva. Este movimiento pretende estudiar las bases del bienestar psicológico basándose en las emociones positivas como la felicidad o la alegria y en las fortalezas humanas como el optimismo, la resiliencia, la sabiduria y la creatividad entre otras.
En el pequeño libro “La buena crisis“, Àlex Rovira menciona al brillante economista britànico de finales del siglo XIX Alfred Marshall, quien dijo antes de morir “He llegado a la conclusión de que la economía es un vano intento de narrar psicología”.
Según él, todo proceso económico no es más que la manifestación de un conjunto de procesos psicológicos, conscientes e inconscientes, individuales y colectivos.
Esta idea de Marshall me ha servido para enlazar con la importancia de la psicología positiva y del optimismo como fortaleza a cultivar en esta época en la que se nos bombardea con mensajes catastrofistas sobre la situación económica mundial y la de nuestro pais en particular. Sólo si albiramos el furturo con optimismo y nos agarramos a él para trabajar en el presente pordremos seguir motivados para continuar.
Le tomo prestado a Rovira el término psiconomía, aunque creo que no es suyo, ya que reune etimológicamente en una palabra lo que creo que es fundamental hoy en día; incluir la psicología en todas las ciencias que tengan a ver con las personas y sus conductas y la economía es una de ellas.
Considerando los conocimientos que tenemos sobre el comportamiento humano basados en la psicología tanto individual como social, podemos gestionar de manera más profunda los procesos económicos.
En el ejercicio de la psicoterápia me encuentro, muy frecuentemente, con el desánimo, la desesperanza, el miedo etc. de mis pacientes. Emociones y afectos negativos que subyacen en el estado depresivo.
Es momento de optimismo, de esperanza y confianza. Es momento de coraje.
