En estos días he visto la peliculla Cobardes. Trata de un caso de acoso escolar  protagonizado por los hijos de unas famílias corrientes en un barrio corriente de una ciudad corriente. La recomiendo. Me ha parecido un acierto que el final quede abierto, cosa que favorece la reflexión. Y es que justamente , lo que necesitamos es reflexionar sobre este síntoma que muestran los chicos del instituto y que refleja la patología de la sociedad.

Varios aspectos que me impactan; el sadismo; el goce por el sufrimiento ajeno. El disfrute perverso que hace olvidar, por un momento, las angustias propias viendo como sufre el prójimo.
Otra cuestión muy evidente es la falta de comunicación. No escuchamos a los jóvenes. No tenemos tiempo, no nos paramos a “escucharlos” atentamente.
También el individualismo, la dificultad para empatizar, la falta de compasión, la agresividad, el miedo…estan presentes, en los comportamientos de los protagonistas tanto adultos como jóvenes.

El acoso es un tema que afecta gravemente al individuo que lo padece a cualquier edad, pero aún reviste mayor seriedad en la adolescencia. En esta etapa vital hay muchos aspectos psíquicos en juego que determinaran, en gran medida, la vida adulta.

Os animo a ver la película y a comentarla en familia, con amigos, en la escuela, etc, es un tema social en que todos estamos implicados y que podemos intentar  prevenir también entre todos.