¿Qué hacer cuando la pareja está en crisis?
Muchos hombres y mujeres se hacen esta pregunta cuando las diferencias en el seno de la relación se convierten en un problema grave. Ante esta situación sólo dos opciones parecen posibles: separase o buscar ayuda profesional.

Todos sabemos las dificultades con las que nos hemos ido encontrando al iniciar una relación y que hemos ido superando a medida que la pareja se va acoplando. Otros problemas, sin embargo, surgen y crecen a medida que la pareja avanza en su vida en común y se enfrenta a grandes cambios como la llegada de los hijos, las demandas de la economía familiar, la inestabilidad laboral de uno o de los dos, las relaciones con la familia del otro, etc. Entonces la falta de comunicación, el resentimiento, la infidelidad, los celos, la falta de deseo sexual, la rutina y el aburrimiento pueden hacer mella en la pareja o matrimonio y poner en riesgo su continuidad.

Los terapeutas de pareja asesoramos y proponemos soluciones a los conflictos a través del estudio pormenorizado de cada caso, utilizando los recursos más adecuados a cada pareja para que resuelvan sus diferencias y, así, mejorar y fortalecer la relación. También podemos ayudar, llegado el caso, a que el proceso de separación sea lo menos traumático posible.

La terapia de pareja que propongo a mis clientes tiene como objetivo dar una oportunidad más a la relación, en una apuesta clara para que esa unión no se rompa. Para ello, hay que introducir pequeños cambios en la relación que mejoren la convivencia y que refuercen el amor mutuo. Yo creo que detrás de un conflicto de pareja siempre hay un problema sin resolver y que vale la pena intentar solucionarlo. No hay que olvidar que el amor es el pilar más importante de la felicidad y que todas las parejas sean hetero u homosexuales quieren que la relación funcione y sea duradera.